El curso se sitúa en la tradición que comprende que la oración que Jesús enseñó a sus discípulos constituye una síntesis extraordinaria del cristianismo. A lo largo de los siglos esta oración ha representado un modo privilegiado de comunicación de los cristianos con Dios, considerando que ella expresa tanto la cercanía trascendente del Dios liberador, como las aspiraciones más profundas del ser humano y de su historia. El curso intenta constatar el significado que para los cristianos de hoy habita. El Padrenuestro, en lo que es la comprensión de su fe, y sus relaciones con los demás y el mundo que vivimos.