El curso reflexiona sobre el acceso histórico a Jesús y los inicios de la cristología, realizando un recorrido retrospectivo por las fuentes: desde las fuentes escritas al kerygma primitivo, y desde el kerygma primitivo al Jesús prepascual. Se busca mostrar la relación entre la historia y el contenido de la fe, y que los datos que aporta la ciencia histórica no están en contradicción con la fe de la Iglesia, lo que implica que la fe cristiana es una opción razonable. El curso dedica bastante espacio a cuestiones de método bíblico y a la interpretación de los evangelios para destacar el carácter histórico de la revelación y mostrar así el valor y los límites del lenguaje teológico.